Hola
Juan Jesús.
Tempus
fugit.
Un año más nos encontramos en este 1º de mayo,
fecha que elegiste para emprender tu viaje de ida; y un año más,
quiero dedicarte unas palabras de recuerdo, de cariño y de añoranza.
Palabras
que tomo de aquellos amigos que tuvimos el privilegio de encontrarte
y de caminar (de una forma u otra, más o menos tiempo) contigo.
Sabes,
si se mira con la suficiente distancia (y tú ahora lo puedes hacer),
la vida en este planeta es siempre la misma a pesar de las
diversidades de vivencias, de las vicisitudes de cada uno de
nosotros, del aprovechamiento que de ella hagamos, de la ilusión y
sonrisa con la que despertemos cada día, todo se reduce a
nanosegundos en el gran engranaje del Universo. Son suspiros que
desde lejos, apenas se oyen.
Y sin embargo, en el día a
día sucede lo contrario, y cada segundo, cada emoción, cada
recuerdo, se convierten en vivencias transcendentales y universales,
tal Aleph visto bajo el prisma de la mirada de nuestro admirado
Borges.
Por ésto, a pesar de la insignificancia de
nuestro día a día vista desde ese espacio infinito donde te
encuentras, me parece oportuno darte noticias de nuestras “pequeñas
cosas” y sobre todo de nuestro recuerdo y cariño.
Durante
este año, sucedieron cosas importantes para el mundo y para
nosotros.
Algunas fueron muy importantes y no siempre buenas :
guerras, enfrentamientos políticos, desbarajuste financiero, aumento
de da desigualdad y de la miseria….
Otras, fueron
importantes para nosotros (tus amigos) y son éstas las que quiero
compartir contigo.
Y hubo
un poco de todo.
Algunos de nosotros o de nuestros familiares,
sufrimos enfermedades, algunas veces graves, que por fortuna se han o
se están superando poco a poco.
Otros, gozamos de buena salud y
seguimos nuestro camino con ilusión y gratitud por la vida.
No
voy a dar nombres para no olvidar a nadie, como siempre hago, pero
nos reconocerás a todos.
Uno
de nosotros, sigue disfrutando de la vida, con sus perros y
pastoreando (como te prometió que haría) su rebaño de Acheta
domesticus y de Gryllus bimaculatus, que cada día afinan más su
canto, sobre todo cuando les comenta cuánto te recuerda.
Hay
quien continúa con sus giras asturianas, convirtiéndose en nuestra
corresponsal de celebraciones, fiestas y paisajes. Y siempre tiene un
momento para poner algún cartel de buenos día y buenas noches.
Alegría, bondad y sensibilidad, también se emociona al
recordarte.
Otra persona del grupo de amigos, también
isleña de adopción como tú (aunque en otro archipiélago) continúa
luchando por la vida, siempre amable y pendiente de las fechas; hace
poco por tu cumpleaños, te escribió una felicitación a la que nos
sumamos todos.
La
fotografía, las sendas asturianas y la micología, no tienen secreto
para otros de nuestros amigos, que echa de menos tus comentarios
sobre las distintas sendas de montaña y los intercambios sobre los
tipos de setas, sus propiedades y localización…..
Desde lejos, hay quien echa de menos sus “discusiones”
contigo...y te recuerda.
Y al no
haber “discusiones”, otro de los amigos, se quedó sin trabajo de
pacificadora…..aunque como todos nosotros, te sigue recordando con
cariño.
Están, y son más de uno, los que a menudo,
cuando se disponen a comer, recuerdan tus recetas de cocina, tus
consejos de comida saludable.
Y los que te echan (echamos)
de menos tu canción de cada día, avisándonos de que ya es la hora
de descansar
...y
muchos más…
Y yo, yo sigo más o menos como siempre.
También te recuerdo aunque no solo un 1º de mayo, tu cumpleaños o
San Juan.
Y como ves, también llenando inútilmente papel con
obviedades.
No necesitaba decir tantas cosas, pero es que me
parecía que estaba hablando contigo y comentando el vacío que nos
dejaste.
Sin embargo, y tú lo sabes, bastaría un “te
recordamos y seguimos añorando, JJ”
Hala !