martes, 24 de abril de 2012

LA CREMALLERA


Celebrando un invento útil : LA CREMALLERA
Cremalleras

Inventos ingeniosos, útiles y prácticos, hemos tenido a lo largo de la historia de la humanidad. De hecho, la constante del ser humano (aparte de complicarse la vida y buscar la parte más negativa de su existencia), ha sido el progreso; el progreso por medio del invento y de la mejora de instrumentos, enseres, herramientas y artilugios varios de uso frecuente o cotidiano.

Hoy se celebra un invento útil a la par que discreto : La Cremallera. 
La cremallera nos ha sido ( y nos sigue siendo ) útil en un sinfín de situaciones. vestidos, artículos de marroquinería, cerramientos industriales, calzado y un sin fin de artículos y artilugios de uso común.

Tenía la intención de preparar un corto artículo sobre la cremallera, y a tal fin, me paseé por la Red en busca de datos y de información. En este paseo, me encontré con un artículo publicado en www.eltamiz.com, que me gustó, y como creo que no lo mejoraría, paso a copiarlo y compartirlo con quienes me lean. 

LA CREMALLERA

En el artículo de hoy hablaremos de un objeto muy extendido hoy en día, y al que no solemos dar mayor importancia, pero que me encanta por la sencillez de su concepto y la eficacia en su ejecución: la cremallera. ¿Sabías que las primeras tenían ganchos y ojos? ¿Y que, durante cierto tiempo, se consideraban incitadoras del sexo ilícito y signo de una “mujer fácil”? Pues sigue leyendo.
Hubo un tiempo en el que no había cremalleras: tampoco eran una necesidad acuciante, pues otros modos de cerrar prendas o unir piezas de tela existían y funcionaban bastante bien, como los botones, cordones, etc. Sin embargo, todos esos sistemas tenían dos problemas comunes para algunos usos.
Por un lado, eran muy lentos: cerrar un abrigo con botones lleva cierto tiempo, lo mismo que utilizar cordones o lazos. Por otro lado, todos esos sistemas tenían “puntos de anclaje” entre las dos piezas de ropa, que dejaban espacios abiertos entre ellos. Era posible disminuir estos espacios si existía una gran densidad de anclajes (por ejemplo, botones), pero nunca era perfecto y, además, aumentaba el tiempo necesario para abrir o cerrar la ropa.
Cerramientos industriales
Como ocurre muchas veces, la cremallera no apareció como invento de la nada, sino que evolucionó (a través de la mano de varios inventores) desde una forma primitiva muy parecida a los botones hasta el ingenioso dispositivo que utilizamos hoy en día. La primera patente de algo similar a nuestras cremalleras es de 1851, en Estados Unidos, y es una patente de un “sistema de cierre para ropa automático y continuo”.
Este sistema fue inventado por Elias Howe, y consistía simplemente en una serie de pequeños broches que estaban en una cinta de tela en uno de los dos lados de la ropa. Los broches podían deslizarse libremente por ella, y unirse a otra cinta similar en la otra pieza de ropa, por la que también podían deslizarse. Claro, sólo con esto no se resuelve el problema: los broches unían las dos piezas de tela, pero se deslizaban hasta el extremo inferior debido a la gravedad, y podían separarse unos de otros fácilmente. Sin embargo, un cordón atravesaba todos los broches por el centro, de modo que, tirando del cordón y haciendo un nudo con él, se apretaban todos los broches unos contra otros, logrando que las dos piezas de tela quedasen unidas sin espacios libres “entre botones”.
Puedes imaginar que este sistema no era perfecto: por un lado, aún había que hacer un nudo en el cordón para mantenerlo tenso y, por otro, cerrar todos los broches llevaba el mismo tiempo (o incluso más, no lo sé) que cerrar botones. Sin embargo, no me negarás que la idea es ingeniosa y que fue un avance considerable. (Por cierto, Elias Howe también patentó una de las primeras máquinas de coser útiles, un tipo ingeniosísimo).
Pasarían 40 años hasta que la siguiente patente más avanzada que la de Howe fuera presentada: en 1891, otro americano, Whitcomb L. Judson, inventó un sistema de cierta ingenuidad, pero más eficaz que el anterior. La cremallera de Judson consistía en una serie de ganchos unidos a una tira de tela (en un lado de la ropa) y otra serie de bucles (anillos metálicos) unidos al extremo opuesto en posiciones fijas. Una pieza se enganchaba al extremo inferior de la “cremallera” y se deslizaba hacia arriba, empujando los ganchos hasta que entraban dentro de los anillos uno a uno. A continuación (esto, no se por qué, me hace mucha gracia), la pieza deslizante se sacaba por el extremo superior de la cremallera y se guardaba en el bolsillo hasta que hiciera falta realizar el proceso contrario.
La cremallera de Judson tenía dos fallos que impidieron que llegara al mercado (aparte ya de lo de llevar el “deslizador” en el bolsillo). Para empezar, si consigues imaginarte el sistema con mi pobre descripción, entenderás que si las dos piezas de tela no tiran de los ganchos y los anillos con cierta tensión, manteniéndolos unidos, la cremallera tiende a ser poco sólida y se abre fácilmente. Además, cada par gancho/anillo era independiente de los demás: ¡se podían abrir unos cuantos, con lo que no podías abrir la cremallera con el deslizador hasta que no los cerrabas primero manualmente!
Uso de la cremallera en marroquinería

Sin embargo, puedes ver que estamos ya cerca del concepto moderno. Judson tuvo problemas financieros debido a los fallos del diseño, además de que las piezas eran difíciles de fabricar en masa, de modo que hubieran sido cremalleras demasiado caras para ser viables económicamente. La empresa del inventor pasó por varios nombres y socios financieros, además de cambiar de ciudad varias veces.
Las desventuras de Judson acabaron cuando en 1906 entró en la empresa un inmigrante sueco, Gideon Sundback, que mejoró los diseños anteriores en varias etapas, resolviendo los problemas uno por uno en modelos consecutivos. Finalmente, en 1914, Sundback desarrolló la maravilla de la ingeniería (sí, francamente lo es) que es la cremallera moderna, que sí pudo venderse con mucho éxito.
Expositor de cremalleras de colores
El problema de los sistemas anteriores de la empresa, como se dio cuenta Sundback, era que cada cierre no estaba unido al anterior y el siguiente. La idea de una pieza deslizante era buena, pero había que conseguir que cada cierre estuviera unido al de arriba y abajo, como ocurría en el caso de la primitiva versión de Elias Howe (la del cordón). La solución es muy simple cuando te la cuentan, claro, pero hay que quitarse el sombrero ante el genio de Sundback:
Cada pieza del cierre tiene un “hueco” en la parte inferior, y un “saliente” en la superior. Inicialmente forman dos hileras de cierres (una en cada pieza de ropa), pero queremos que al final sólo haya una fila, la fila de cierres todos unidos. De modo que la pieza deslizante debe tener forma de “Y”cada una de las dos hileras de cierres entra por un brazo superior de la Y, que actúa de “embudo”, empujándolas una hacia la otra. Cuando se encuentran en el centro de la Y, el saliente superior de una pieza se introduce en el hueco de la siguiente, cuyo saliente se introduce en el hueco de la siguiente, etc.
Instalación para tren de cremallera.

¿No es una idea absolutamente genial? De ese modo, si se tira hacia los lados de cualquier cierre, no es posible abrir la cremallera, porque esa pieza está unida por arriba y abajo a dos piezas del lado opuesto de la cremallera, y esas dos están unidas a piezas de este lado de la cremallera. Sólo levantando el cierre superior (que no está unido a nada por encima) puede levantarse el siguiente y así, uno a uno, abrir todos ellos. Como sucede en el caso del velcro, el truco no está en puntos de anclaje muy resistentes (como los botones), sino en una multitud de anclajes no demasiado fuertes uno por uno, pero de una fuerza total muy grande.
Cremalleras en la industria textil
Además, la cremallera de Sundback resolvía todos los problemas que las primitivas habían tratado de solventar: las piezas encajan muy bien unas con otras, de modo que el cierre es muy compacto y no deja entrar el aire (ni el agua). Por fin existía un cierre que se utilizaría en tiendas de campaña, trajes de buceo, chubasqueros, etc. Además, deslizar la pieza móvil para abrir o cerrar la cremallera es infinitamente más rápido que abrir o cerrar botones (salvo que alguna pieza se enganche donde no debe, que a veces pasa, claro).
Uso de cremallera en la industria del calzado
Al principio, las cremalleras formaron parte de botas y tabaqueras, pero con el tiempo su uso se fue extendiendo. En los años 20 se empezaron a utilizar en pantalones y en ropa de niño, y en los años 30 la diseñadora Elsa Schiaparelli las incluyó en algunos de sus diseños de vestidos de alta costura, y en poco tiempo la cremallera formaba parte de la ropa en muchos países: el mayor fabricante actual de cremalleras, la empresa japonesa YKK, fue fundada en 1934 por Tadao Yoshida, y Japón fabrica más de la mitad de las cremalleras del mundo.
Desde luego, nunca llueve a gusto de todos: durante cierto tiempo, al principio, las cremalleras tuvieron mala reputación. El hecho de que permitieran a una mujer quitarse el vestido muy rápido era considerado por algunos como favorecedor del sexo ilícito, de modo que las mujeres que utilizaban cremalleras eran consideradas por algunos sectores de la sociedad como “fáciles”. Curiosamente, a nadie le preocupaba que un hombre pudiera quitarse la ropa rápidamente o no. Ni qué decir tiene que, en unos años, ideas estúpidas como esa (que acompañan a menudo a nuevas invenciones) fueron desapareciendo y hoy nadie da mayor importancia a las cremalleras.
Google rinde homenaje al invento de la cremallera

Decoración con cremallera
Originalmente eran de metal: las cremalleras más parecidas a las de Sundback que puedes encontrar hoy son las de los pantalones vaqueros. Sin embargo, hoy en día se fabrican mejor diseñadas que entonces, más ligeras (suelen ser de plástico) y se enganchan menos, los cierres son más pequeños… pero su diseño esencial y la idea de “enganchar cierres mediante una Y” siguen siendo fieles al concepto de Sundback. Por otro lado, tampoco olvidemos a Judson y Howe, sin los que el sueco no hubiera desarrollado tan útil invento.
Por cierto, el nombre cremallera viene del francés crémallière, que a su vez proviene del latín cramaculus, a su vez proveniente del griego kremastê, que significa “que cuelga”. No tengo la más mínima idea de por qué se llamó a este invento de ese modo (el nombre en inglés, zipper, parece deberse al sonido que hace al abrirla o cerrarla). La mejor pista que he encontrado es que crémaillère se utilizaba en francés para designar la cadena metálica de la que colgaba la olla sobre el fuego de la chimenea. Si alguien tiene información, ya sabéis.




jueves, 12 de abril de 2012

COMPLICACIONES INFORMÁTICAS


Estoy repasando las notas que publiqué en Facebook, y me encuentro con una de fecha 16 de septiembre de 2011.
La verdad es que no recuerdo quien me la envió o si la copié de algún sitio; me pareció entretenida en aquella fecha y me lo sigue pareciendo hoy, por lo que decidí compartirla en el blog. Espero os guste.

Además (las cosas como son), me permite algo más de tiempo para "tomar impulso" y preparar las publicaciones que tengo pendientes.



El Matrimonio según la informática

Un acongojado cliente manda un mensaje a la compañia que le ofrecio el sistema operativo esposa 1.0
Estimados Señores:
El año pasado cambié de la versión NOVIA 7.0 a la versión ESPOSA 1.0, y he observado que el programa al cabo de un tiempo comenzó con unos procesos inesperados de sub-rutinas, que luego fueron a más, descargándose un programa oculto denominado HIJO 1.0 que me ocupa muchísimo espacio de disco duro, utiliza recursos importantes, y además enlentece de forma alarmante el Sistema Operativo.
Por otra parte, ESPOSA 1.0 se auto instala como residente en la memoria RAM y se lanza durante el inicio de cualquier aplicación, monitorizando todas las actividades del sistema.

· Aplicaciones como:
· CHELA CON AMIGOS 10.3
· NOCHE DE JUERGA 2.5
· FÚTBOL DOMINGUERO 5.0,
ya no funcionan normalmente y el sistema se cae cada vez que intento ejecutarlos.

De vez en cuando se lanza un programa oculto (creo que es un troyano) denominado SUEGRA 1.0 que aparece cerrando varios puertos de conexiones y consigue colgar el sistema, o que ESPOSA 1.0 se comporte de manera totalmente impredecible, por ejemplo, dejando de atender a cualquier comando que quiera introducir.

Estoy pensando en volver al programa anterior NOVIA 7.0, pero no he podido desinstalar a ESPOSA 1.0 o al menos mantenerlo minimizado.
¿Me podrían ayudar?. Muchas gracias.


REPUESTA DEL SERVICIO TECNICO:

Estimado usuario afligido:

· Este es un motivo de queja muy común entre los usuarios. Se debe, en la mayoría de los casos, a un error básico de concepto. Mucha gente pasa de cualquier versión de Novia X.0 a Esposa 1.0 con la idea de que es solo un programa de Entretenimiento y Utilidades. Sin embargo, Esposa 1.0 es un SISTEMA OPERATIVO COMPLETO, diseñado para controlar TODO el sistema.
Es muy poco probable que usted pueda desinstalar Esposa 1.0 y regresar a cualquier versión de Novia X.0. Es casi imposible desinstalar o eliminar los archivos del programa una vez instalados.

· Lo mismo pasa con Suegra 1.0 que es una aplicación oculta que se instala en la RAM mientras Esposa 1.0 funciona.
Hay quienes han intentado el formateo a baja densidad, para luego instalar los programas Novia Plus o Trampa 2.0, pero terminan con más problemas que antes, (vea en el Manual, el capítulo “Pago de Pensiones" y "Mantenimiento de Hijos“).

· Considere la posibilidad de instalar algún software adicional para mejorar el rendimiento de Esposa 1.0. Son especialmente recomendables,como: PedirPerdon.Exe, Flores 5.0, Joyas 2.3; también puede usar Loquetudigas v9.7. Y evite el uso excesivo de la tecla “ESC”
JAMAS instale Secretariaconminifalda 3.3, Amiguitacariñosa 6.9 o Amigotesinoportunos 4.6.

· Estos programas NO funcionan bajo Esposa 1.0, y muy probablemente, causen daños irreversibles e irreparables al Sistema Operativo.

· Si todas las opciones fallan, puede optar por sistemas basados en otras plataformas existentes en el mercado pero bajo su propio riesgo como Celibato 1.0 o Maricón 5.3.
MUCHA SUERTE / ATTE SERVICIO TECNICO.

martes, 10 de abril de 2012

LA JOVEN CIEGA


Hojeando algunos blogs, me encontré con este cuento, que me pareció precioso.


Es el blog de CELE y se llama "Iluscave :historias, humor y amor"

www.iluscave.blogspot.com

LA JOVEN CIEGA

Esta es la historia de una joven ciega que se odiaba a si misma, y a todo el mundo por ser ciega Odiaba a todos, menos a su novio que la quería mucho.
Un día, consiguió un par de ojos sanos, la operaron y pudo ver
Cuando lo hizo, el novio le preguntó si se casaría con el, a lo que ella respondió que no, porque se dio cuenta que él era ciego
El novio, triste, lo comprendió y se despidió de su vida
En su partida le dejó esta nota:
Tan solo te pido que cuides muy bien de mis ojos pues te los regalé y ahora son los tuyos.


Te amo